CAMINANDO POR NUESTRA SIERRA DE GUADARRAMA: 2º PICO (30 Junio 2.012)
De vuelta de las Hogueras de San Juan, decidimos dar trabajo
a nuestras piernas. El último sábado de junio
subirnos a la sierra, ya que el tiempo había refrescado y la temperatura era
agradable, aunque constatamos que las flores de las retamas y las jaras habían
desaparecido o estaban agostadas.
Quedamos con nuestro amigo Juanito en las
Dehesas; uno de los lugares de la Sierra más fresquitos en esta época del año. Había
mucha gente especialmente familias con niños para disfrutar de un día de campo
en un lugar con abundante agua y sombra.
En esta zona hay cinco caminos, que en algunos tramos se cruzan
y se solapan entre ellos:
· La
Calzada Romana data del siglo I d.
de J. en tiempos del emperador Vespasiano. Es un tramo de 10 Km. Que se
denomina Vía XXIV del itinerario de Antonino que unía Emérita Augusta (Mérida) y
Caesar Augusta (Zaragoza), venía de Segovia, pasando por el Puerto de la
Fuenfría, Cercedilla seguía hacia los Molinos, Collado Mediano, Alpedrete y Galapagar; continuando hasta Tutilcia localidad próxima a Aranjuez. Probablemente, pasaba por la madrileña Casa de Campo. Esta
calzada está declarara Bien de Interés Cultural desde 1.981. En este tramo de
montaña está marcada de verde y
tiene una pendiente media del 8%.
·
La
Calzada Borbónica se construye en el siglo XVIII, como camino que utilizaban
los borbones para desplazarse de Madrid a la Granja de San Ildefonso. Esta
calzada se ha confundido con la romana, pero los estudiosos del tema vieron que
tenía una pendiente del 25%, que entraba en contradicción con las pendientes de
las calzadas romanas que no rebasan el 10%. Está marcada con color blanco.
·
Camino Viejo Segoviano trazado por la ladera contraria del valle, la
occidental o del Infante. El trazado es bastante compensado de unos 5
kilómetros, con una pendiente casi constante del 9%, va de Cercedilla, va de
Cercedilla a Segovia para dar servicio a los ganaderos de la zona.
·
El Camino Schmid
transcurre entre el Puerto de Navacerrada y el Valle de la Fuenfría entre los
frondosos pinares de Valsaín, en la vertiente norte, y de los de Cercedilla en
la sur, constituyendo una de las masas más importantes y mejor conservadas de
pino silvestre del Sistema Central.
El camino Schmid es la excursión por antonomasia desde el Puerto de
Navacerrada hasta el Valle de la Fuenfría, o al contrario. Su nombre se debe a
Eduard Schmid. Entre finales de siglo XIX e inicios del XX, se puede decir que se inició
el redescubrimiento de la Sierra de Guadarrama por parte de un pequeño grupo de
gente, que se acercan hasta ella, por motivos diferentes: científicos,
pedagógicos y con fines lúdicos.
De esta época datan las primeras sociedades montañeras, como Twenty Club (1907), que más
tarde se convertirá en el Club Alpino
Español o Los Doce Amigos (1913) que pasó a ser Sociedad de Alpinismo Peñalara.
Estas asociaciones tenían como objetivo conocer y dar a conocer, en todos sus
aspectos, el Sistema Central de la Península.
Eduard Schmid socio nº 13 de
la Real Sociedad Española de Alpinismo Peñalara, que señalizó en 1926 la ruta
que une el Puerto de Navacerrada con el albergue que dicha sociedad tiene en el
Valle de la Fuenfría.
Esta senda esta marcada con color amarillo
y en muchas ocasiones, coincide atraviesa y va en paralelo con las calzadas
romana y borbónica.
· La Carretera de
la República comienza en las
Dehesas de Cercedilla y continúa por el Puerto de la Fuenfría. Carretera que
empezó a construirse en 1.930 en época de la Dictadura de Primo de Rivera para
unir el pueblo de Cercedilla con el de Valsaín en Segovia.
En la Segunda República se paró el proyecto y se quedó en la pista
forestal que hoy es muy transitada por familias y ciclistas. La pendiente es
bastante constante y suave. En su trayectoria destacan una serie de miradores
como: el mirador de Vicente Alexandre, el mirador
de Luis Rosales y el mirador de la
Reina todos ellos con unas vistas fantásticas al valle. Además podemos
encontrar llegando a la pradera de Navarrulaque un reloj de sol construido en memoria de Camilo José Cela.
Nosotros
decidimos iniciar la marcha por la senda Schmid, cruzamos el Puente del Descalzo
y en tres cuartos de hora nos encontramos en la fuente Antón Ruiz de Velasco,
llenamos las cantimploras con un agua deliciosa (sin tratar).
Continuamos
por una fuerte pendiente hasta el collado Ventoso (1.892m.), nos desviamos
hacia la Senda de los Alevines, senda que asciende por la vertiente suroeste
del cordal de Siete Picos hasta la pradera de Majalasna y el Pico Majalasna. A continuación
seguimos por otra la senda bien marcada con hitos hasta llegar al Segundo Pico
(2.093 m.) de Siete Picos. Las vistas son fantásticas, corre un aire fino que
hace la estancia a pleno sol agradable. Decidimos comer deleitándonos del
paisaje y de un cafelito que hemos subido en un termo.
Acordamos
bajar a Collado Ventoso por la cara norte, el descenso está empinado pero con de
cuidado estamos en 15 minutos en el collado.
Continuamos
por la senda Schmid, hasta el cruce con la senda de los Cospes, cogemos esta, hasta
el Puerto de la Fuenfría. En la fuente rellenamos las cantimploras y tomamos el
camino de la calzada romana vía XXIV, que discurre por una zona bastante
umbría, que es de agradecer. Durante el trayecto aprovechmos para leer una
serie de paneles explicativos sobre la construcción y mantenimiento de la
misma.
Llegamos
a los coches con la sensación de haber pasado un buen día, disfrutando de la
naturaleza en buena compañía.
Distancia: 14,34 km
Dificultad técnica: Fácil
Tiempo: 7 horas 12 minutos
Fecha de subida 30 de junio de 2012
Saludos
Juanito,
Asun y Julio
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